El clamor popular contra el trasvase, puesto de manifiesto los pasados 23 y 30 de agosto, choca con la irracionalidad e insensatez de la CHG, el ministerio de Medio Ambiente y la Junta de Andalucía, empeñados en proseguir las obras del trasvase a pesar de la alarma desatada.
Las máquinas se abren camino por la dehesa destrozando todo lo que a su paso encuentran. Esta mañana le tocó el turno a las alamedas de Pedro Álvarez. Sin identificarse, sin enseñar ningún tipo de autorización, talaron sin piedad los chopos que ellos consideraron. Los propietarios no sabían qué parte era la afectada, pues la CHG no respondió a las alegaciones que en su día se hicieron. Tampoco firmaron el acta de ocupación y, además, presentaron alegaciones que la CHG, una vez más, no ha respondido.
Miembros de la Plataforma que acompañaron a los propietrios avisaron a la Guardia Civil de la intromisión y destrozos que se estaba produciendo en la parcela. Finalmente esta los derivó al juzgado de Huéscar para interponer la correspondiente denuncia.
Las fotos hablan por sí mismas.
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