La comunidad de regantes El Portillo ha adjudicado las obras
para transformar 2.500 hectáreas de secano en regadío, una inversión que pagarán los agricultores, que esperaban
apoyo público para esta infraestructura desde la década de los ochenta.
La obra, adjudicada a la UTE formado por Aldesa y ACSA
Sorigué, pretende conducir el agua del embalse de El Portillo a sus dos
principales zonas regales, elevándola 250 metros.
Castril logró la concesión de agua para el riego de 2.500
hectáreas de olivar y almendros en 2013 tras catorce años de reivindicaciones
para convertir los cultivos de secano en regadío y acometerá ahora las obras,
con un coste aproximado de 10.000 euros por hectárea y un plazo de ejecución
previsto de 18 meses. Esta iniciativa apuesta por una agricultura familiar de
calidad y orientada a la producción ecológica.
El alcalde del municipio, Miguel Pérez Jiménez, ha recordado
que la economía del municipio se sustenta en la agricultura y el turismo rural,
y ha confiado en que prospere a medio plazo y permita con estas obras aumentar
la renta de sus vecinos.